A pesar de la gran selección de materiales de acabado, pintar paredes y techos sigue siendo una forma popular de acabado de superficies. Este material es una suspensión de pigmento coloreado que crea una película impermeable en la superficie a tratar.
Las paredes están pintadas tanto en interiores como en exteriores. Hay dos tipos principales de pintura que se usan universalmente.
1. Pinturas y barnices dispersos en agua. Este es el tipo más común de pintura para paredes. La base de este material es el látex o el acrilato, debido a esto la pintura no tiene un olor penetrante y no emite sustancias nocivas después de la tinción. Otras ventajas de la pintura de dispersión de agua incluyen una excelente permeabilidad al vapor, secado rápido, la capacidad de soportar cambios de temperatura, sin pretensiones en el cuidado, resistencia al desgaste y durabilidad.
2. Pintura organomineral. Esta opción es más tóxica, por eso se usa exclusivamente para uso en exteriores. Las características distintivas de las pinturas y barnices organominerales son una mayor resistencia a la humedad, la capacidad de soportar condiciones ambientales adversas, resistencia al desgaste
Al elegir la pintura adecuada, es importante decidir si usará el material para uso en interiores o exteriores. Si el interior se va a pintar con pintura, se debe prestar atención a la transpirabilidad del material. Para el trabajo al aire libre, uno de los criterios importantes es la resistencia al desgaste.
En general, la elección de la pintura la lleva a cabo el aglutinante presente en ella.
En cuanto a un fabricante en particular, las revisiones de aquellos que ya han usado pinturas de una marca en particular lo ayudarán a elegir.